En éste próximo mes de Enero 2012 el Wind Chime y su tripulación zarparemos del Club náutico de Quilmes rumbo Ushuaia. Después de una muy larga temporada en el Club diremos adiós a un montón de amigos socios, trabajadores e incluyendo a la dirección del mismo que nos acogieron cariñosamente con los brazos abiertos y dispuestos a ayudar desinteresadamente en lo que sea (pobrecitos, que paciencia han tenido con nosotros...). Nunca, en ningún club, en ningún país, nos han tratado y ayudado como en el Club náutico de Quilmes y por ello estamos realmente agradecidos con ellos ( www.cnq.org.ar ).  Hace ya casi un año que llegamos con intención de estar una semana o diez días para disfrutar de algún potente asado (imperdonable el no hacerlo) con un gran amigo que tengo de Quilmes, su familia y amigos. Después de innumerables cervezas, unas cuantas vacas asadas y no sé cuántas despedidas, nos obligan a decidirnos marchar. Con toda nuestra intención puesta en la difícil empresa arranqué el motor para sacar el velero del agua y limpiar la obra viva.... murió!! Pero como!!! Pero si nos estamos yendo!!! Después de empalidecer y hacerme a la idea de la situación desmonté el motor y lo llevé a una rectificadora. Mucho tiempo, energía y dinero para dejar el velero otra vez en son de mar.

  De por sí ya estaba acabando la temporada de navegación, llegando así el invierno y cuando el motor quedó listo, por supuesto que la temporada ya se había terminado....

  Junio, nos volvemos a Bilbao con la familia a trabajar y recuperar los fondos perdidos. Duro golpe el que cuando ya está todo listo para zarpar y las ilusiones al 100%, menudo revés... Alegría por volver a estar con la familia y amigos, verano...

Ahora con fuerzas renovadas, con un verano y un otoño disfrutado en familia, con amigos y en lugares donde todo nos es familiar, me preparo física y mentalmente para una vuelta a la aventura. En este caso, seguramente una de las más importantes y bonitas que tendré en mi vida. Todos los que hemos leído y pasmado con las aventuras de navegantes pasados, creo no equivocarme en que este viaje es seductor en sí mismo y promete muchas sorpresas. Son parajes que perduran como siempre fueron gracias a que apenas están habitados. Nadie molesta a los lobos de mar, elefantes marinos, leones, pingüinos, ballenas, orcas, albatros... Están en sus tierras y mares y así se les respetan, por ello veo a estos lugares la gracia de sentirlos salvajes. 

  Las escalas previstas son Mar de plata, Puerto Madrin, isla de lobos, caleta hornos, isla de los estados y Ushuaia. Una de las cosas que he ido aprendiendo en mis viajes es que los planes tienen vida propia y hay que amoldarse a ellos, por lo que son susceptibles a cambios.

  En este viaje tendremos la grandísima ayuda de Miguel Urbieta, que desinteresadamente transmite a modo personal y a diario la meteorología para todo el navegante que se conecte en su ronda de navegantes: desde las 22:30 UTC en 14.395Mhz. Como se agradece una ayuda como esta cuando se navega, especialmente en zonas de este tipo.